Bogotá es una ciudad que escucha a sus niñas

Desde el año 2011, en todo el mundo, se adoptó el 11 de octubre como el Día de la Niña, fecha que busca ser un llamado a los gobiernos y a la sociedad a crear conciencia sobre la situación de las niñas, reconocer los desafíos específicos que enfrentan y promover su empoderamiento. No es descabellado afirmar que el camino sigue siendo largo, y que las dificultades de este, como los fenómenos del cambio climático, los conflictos humanitarios y el Covid-19 no hacen la tarea más fácil para las instituciones públicas.

Sin embargo, esto no detiene a Bogotá en sus continuos esfuerzos para garantizar el cumplimiento de los derechos humanos de las niñas. La política pública “Juntos por las niñas”, busca fortalecer la participación de las niñas en materia de liderazgo y empoderamiento, para lograrlo, busca incorporar dentro del Plan de Desarrollo, programas, proyectos, servicios sociales y estrategias con enfoque diferencial y de género.

La beca “Iniciativas de Participación Cultural Infantil” es un empeño de la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte (SCRD) para enfatizar y motivar la participación cultural de niñas, niños y adolescentes de Bogotá. Cuatro agrupaciones culturales y artísticas fueron beneficiadas, las cuales llevaron a cabo proyectos en que las poblaciones mencionadas fueron el epicentro de los procesos. El impacto de estos abarcó seis localidades y áreas rurales, donde más de 50 niñas vinculadas participaron, propusieron y transformaron acciones culturales, recreativas, artísticas y de apropiación patrimonial que se diseñaron con ellas y para ellas en escenarios escolares, barriales, escuelas de formación artística y veredas.

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Al tiempo, busca “promover laboratorios sociales de liderazgo y empoderamiento, talleres, concursos, convocatorias y demás actividades que fomenten la divulgación y presentación de talentos, habilidades y competencias de las niñas de la ciudad, para el fortalecimiento del contexto social, escolar y comunitario”. 

Las niñas deben ser escuchadas. Las niñas deben ser respetadas. Las niñas son lideresas. Las niñas pueden transformar sus contextos. Las niñas deben ser las abanderadas en la igualdad de género. Estos son los compromisos, en ocasiones hasta deudas, que tiene la sociedad para garantizar el goce de los derechos de las niñas alrededor del mundo. Los esfuerzos de Bogotá con nuestras niñas también estarán con la vista puesta en ese horizonte.