¿Qué es el porrismo?

El porrismo, también conocido como cheerleading, es mucho más que un deporte de apoyo para otros equipos. En la actualidad, se ha convertido en una disciplina independiente que combina elementos de gimnasia, baile y acrobacias, llevando a sus practicantes a entrenar arduamente para lograr un alto nivel competitivo. Junto a Eureka, tu canal, tuvimos la oportunidad de visitar la escuela White Bulls Cheer, un lugar donde se respira dedicación y pasión por este deporte. Las y los atletas de Whitebull reflejan el compromiso que el porrismo exige, señalando que ser porrista implica "dejar a un lado fiestas, amigos y fines de semana" para concentrarse en el entrenamiento y las competencias.

La disciplina y el compromiso en el porrismo

Para ser un buen porrista, la disciplina y el compromiso son fundamentales. Uno de los aspectos que destacan los y las atletas de Whitebull es la necesidad de entrenar constantemente para alcanzar los objetivos. "Si no practicas a diario o no eres constante, es difícil lograr el objetivo", comenta uno de las integrantes. Esta mentalidad de esfuerzo constante es lo que permite a las porristas mejorar en sus habilidades, como la gimnasia, las acrobacias y la coordinación, tres pilares esenciales en el porrismo.

Además, el compromiso va más allá de la técnica; también implica trabajo en equipo. En este deporte, la coordinación con el grupo es clave para que las rutinas salgan a la perfección. "Si no te entiendes con alguien en la rutina, tienes que aprender a hacerlo", explican, resaltando la importancia de la comunicación y el entendimiento entre compañeros y compañeras.

Competencia 

El porrismo también es un deporte que despierta el espíritu competitivo de quienes lo practican. "Las competencias te hacen sentir una adrenalina bárbara", mencionan las porristas, destacando la emoción de participar en eventos donde cada equipo busca mostrar sus mejores coreografías y acrobacias. Las competencias sirven para aprender de los demás y crecer como equipo.

A nivel personal, muchas porristas ven en este deporte una oportunidad para desarrollarse. "Lo que más me gusta es que te ayuda a crecer como persona", afirmó una de las participantes, subrayando que el porrismo mejora el compañerismo, la confianza y la capacidad de trabajar en equipo.

Habilidades clave para ser porrista

Ser porrista requiere una combinación única de habilidades físicas y mentales. Entre las principales están:

• Equilibrio y coordinación: esenciales para ejecutar las acrobacias y movimientos de manera fluida y segura.
• Fuerza: necesaria para sostener a los flyers (quienes realizan acrobacias en el aire) y para completar las rutinas sin perder la energía.
• Velocidad y agilidad: son fundamentales en el porrismo competitivo, donde los movimientos deben ser precisos y rápidos.
• Carisma: además de las habilidades físicas, los y las porristas deben motivar al público con su energía y entusiasmo.

Estos atributos, sumados a la disciplina y el trabajo en equipo, son lo que convierten al porrismo en un deporte tan desafiante y satisfactorio.

El género en el porrismo

Aunque el porrismo suele asociarse tradicionalmente con mujeres, en la actualidad es un deporte que incluye a personas de todos los géneros. "Siempre se ha tenido esa percepción de que es más para las chicas, pero también es para hombres", señala uno de los porristas. La inclusión es un aspecto importante en este deporte, permitiendo que cualquier persona que se sienta atraída por la gimnasia, las acrobacias y el trabajo en equipo pueda participar y destacar.

Beneficios del porrismo 

Más allá de las exigencias físicas, el porrismo ofrece múltiples beneficios para quienes lo practican. A nivel físico, ayuda a mejorar la flexibilidad, la resistencia y la coordinación. A nivel emocional, fomenta la confianza en uno mismo y en los demás, ya que muchas de las acrobacias requieren confiar plenamente en los compañeros de equipo.

Además, este deporte refuerza valores como el compañerismo y la resiliencia. "Siempre existe un compañerismo en el equipo, eso te llena el corazón", explica un integrante, destacando el apoyo mutuo entre el equipo en cada entrenamiento y competencia. Estos valores son clave para superar los retos tanto dentro como fuera del deporte.

"Ser porrista significa alegría, baile y felicidad", comentó una de las deportistas, reflejando el espíritu de quienes se dedican a este emocionante deporte.

Si estás buscando una actividad que te permita desafiarte, mejorar tu coordinación y trabajar en equipo, el porrismo podría ser una excelente opción. Como bien dicen en Whitebull: "si tú te quieres meter en este deporte, tu mente debe estar preparada", porque aunque no es fácil, el esfuerzo siempre vale la pena.