
Brayan Salamanca, un artista circense de Ciudad Bolívar que busca dejar huella en la cultura
El circo es mucho más que destrezas, malabares y acrobacias. Es una forma de arte que nace del cuerpo, del riesgo, del juego y del encuentro con el otro. Es un lenguaje sin palabras que conecta con lo más profundo de nuestras emociones, que nos hace reír, soñar y recordar. En cada salto, en cada equilibrio, en cada carpa que se levanta en medio de la ciudad o en el corazón de un barrio, el circo nos recuerda que la vida también puede ser magia y medio para la transformación social y comunitaria.
Brayan Salamanca, artista circense, es un joven de 26 años integrante del colectivo Circósmico, actualmente beneficiario del programa Más Cultura Local, una iniciativa liderada por la administración distrital a través de la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte, la Secretaría de Gobierno con sus 20 Fondos de Desarrollo Local; la Fundación Gilberto Alzate Avendaño - FUGA, y el Instituto Distrital de las Artes - Idartes; con el proyecto “Festival Aires de Circo de Ciudad Bolívar”, evento impulsado y desarrollado desde hace varios años por la Mesa Local de Circo de esta localidad.
Desde muy niño sintió una conexión especial con la cultura en todas sus manifestaciones. Vivir tan cerca de la casa de la cultura le abrió un amplio panorama de posibilidades y le mostró que ese era el camino por donde quería llevar su vida. Cuando tenía 12 años conoció los semilleros que se gestaban desde la Casa de la Cultura: “Empecé asistiendo a los diferentes talleres de formación porque yo vengo de esos semilleros que me permitieron aprender muchísimo, lo mezclé con el conocimiento empírico que fui adquiriendo y eso me sirvió para acercarme culturalmente a muchos otros lugares de Bogotá”, cuenta alegremente Brayan.
Los procesos de formación artística han estado presentes durante toda su vida. Brayan cuenta con orgullo el hecho de haber estudiado en el Centro Juan Bosco Obrero, un centro educativo ubicado en el Barrio La Estrella en Ciudad Bolívar: “Aquí en la localidad hemos sido muy afortunados en todo sentido, y yo personalmente tuve el privilegio de realizar mis estudios técnicos en artes escénicas y circenses aquí en el Bosco Obrero, ese espacio con los salesianos fue muy bonito y enriquecedor, además que tener una carpa y estar rodeado de circo fue muy especial para mí en ese entonces”.
La entrada al mágico mundo del circo
La carpa se levanta como un umbral hacia otro mundo. El escenario, las luces, el vestuario, el maquillaje y las sillas dispuestas para el público; cada elemento es parte del hechizo. Apenas se cruza esa puerta simbólica, la realidad queda suspendida y el circo se impone con toda su potencia: un universo donde la risa, el asombro y la imaginación gobiernan. Para muchos, ese espacio es parte de la infancia; para otros, sigue siendo un refugio. Para Bryan, es todo eso y más: la entrada a un mundo mágico habitado por artistas que caminan sobre cuerdas, hacen malabares con fuego, pedalean monociclos o despiertan carcajadas con una nariz roja.“Todo esto hizo que me casara con el circo, me fui metiendo poco a poco, trabajé en semáforos por cinco años, luego en otro rol pude unirme a iniciativas de formación, talleres en la localidad de Ciudad Bolívar”. Hoy, su apuesta es clara: seguir construyendo espacios donde otras y otros también puedan encontrar en el circo un camino, un oficio y una forma de transformar la vida.
Mesa Local del Circo de Ciudad Bolívar
La Mesa Local de Circo en Ciudad Bolívar es una red de artistas, colectivos, gestores culturales y soñadores que creen en el poder del circo como herramienta a favor de la memoria, la identidad y la transformación social. Desde su creación, ha sido una plataforma para el fortalecimiento del sector, la visibilización de los procesos comunitarios y la defensa del circo como práctica cultural legítima, diversa y vital para el tejido social.
Lo que hace única a esta mesa es su enfoque territorial y comunitario. Aquí el circo no es sólo espectáculo: es escuela, refugio, y memoria. Cada malabar es un acto de resistencia; cada función, un encuentro que resignifica el espacio público y fortalece los vínculos entre vecinos.
Según Brayan, con la mesa local del circo se han logrado grandes avances, dignos de réplica en otras localidades de Bogotá: “Siento que ese trabajo ha funcionado bastante bien en Ciudad Bolívar, lo que nos convierte en un referente distrital para toda la ciudad, he podido evidenciar como se habla de nosotros en localidades como Teusaquillo, Usme, Kennedy, y desde la pandemia, que fue tan difícil para todos, pudimos llegar incluso al municipio de Soacha".
El Séptimo Festival Aires de Circo de Ciudad Bolívar
El Festival Aires de Circo de Ciudad Bolívar nació en el 2015, como un evento comunitario y cultural que celebra el arte circense en uno de los territorios más diversos y resilientes de Bogotá. Nacido desde la organización de la Mesa Local de Circo, este festival reúne a artistas locales, colectivos barriales y agrupaciones en torno a funciones, talleres, entrenamientos, intervenciones en el espacio público y actividades pedagógicas. Más que un espectáculo, Aires de Circo es una fiesta del encuentro, un espacio para visibilizar los procesos formativos del circo en la localidad, fortalecer el tejido comunitario y reafirmar que el arte también habita en las laderas, en los barrios, y en las manos de quienes creen en un futuro más justo y creativo.
Ahora que se viene la séptima edición del Festival Aires de Circo con la presentación de la obra Tierras de Bolívar en el Teatro Ensueño, la Varieté que conmemora los 10 años de la mesa local de circo de Ciudad Bolívar, y el homenaje especial a la artista Sandra Ortíz “La Chinita”, Brayan invita a las bogotanas y bogotanos hacerse presentes en todas las actividades que para este año trae este festival: “Se cumplen 10 años de la Mesa Local del Circo y todos estos motivos nos unen para celebrar lo grandioso de este mundo, la vida, obra de La Chinita junto a todos los actos culturales y artísticos del festival, así que todos están muy cordialmente invitados”.