Paula Pera explora el lado más humano de la música

En abril, Paula Pera, nombre artístico de la bogotana Paula Pedraza, publicó ‘Fin de los tiempos’, un álbum  en el que trabajó durante un poco más de dos años. “Es un disco que se ha tomado mucho tiempo en hacer, por diferentes razones, pero bueno, ya me lancé al agua con esta propuesta sonora”, comenta Paula Pera.  

Una de las pruebas de fuego más importantes para este nuevo material fue un concierto íntimo en el marco del Festival Gabo. Fueron casi cuarenta minutos de música en los que la artista, junto a su grupo, lograron conectarse rápidamente con el público que estaba atento a sus sonidos y a lo que sucedía en tarima.

“Parte de lo que me gusta del en vivo, y la razón por la que yo como persona voy a conciertos, es porque el en vivo sí tiene una magia diferente a escuchar a un artista en el álbum ¿no? Es que ese tipo de cosas que tú ves, que son variaciones, son cosas que se dan orgánicamente dentro de los ensayos, dentro del mismo en vivo, y eso es lo más sorprendente de la música. De hecho, hoy se salió el ‘clic’ al principio, locura total, pero todo eso es bonito porque es humano, y al final la música es humana”,  agrega Paula. 

Durante su presentación, la cantautora reveló detalles valiosos sobre lo se esconde detrás de las canciones y habló de sus principales inspiraciones. “Creo que nos pasa a casi todos los artistas porque es difícil encontrar inspiración cuando estás completamente bien, sobre todo con el amor, porque cuando uno está muy enamorado, como que uno está bien y no tiene la necesidad de contar lo que le pasa por dentro, pero cuando la estamos pasando mal, la guitarra llora con nosotros. Definitivamente encuentro mucha más inspiración en la tristeza”, puntualiza.

La mejor forma de seguir descubriendo el universo planteado por Paula Pera en su disco 'Fin de los tiempos' es dejarse llevar por un viaje sonoro que dura cuarenta y un minutos. Un recorrido musical  que  ofrece también la posibilidad, sin problema alguno, de repetir canciones que seguramente se irán quedando en la cabeza y tendrán eco en el corazón. Canciones para acompañar la alegría o para respaldar esos momentos en los que sentimos que la guitarra acompaña nuestras lágrimas.